Espiral
Consiste en unir las hojas mediante un espiral metálico, acompañadas con tapas de polipropileno o cartón gofrado de diferentes gramajes o colores.
Es la encuadernación más habitual, la más conocida y la más asequible. El resultado final es muy manejable, permitiendo una apertura de 360º. Cabe la posibilidad de desencuadernar, añadir o quitar hojas y volver a encuadernar.
La encuadernación se realiza en el momento, y el coste, muy económico, varía en función del grosor del espiral que oscila entre 6 milímetros y 50 milímetros.